Ahora pongo unas pocas palabras mias, no todas las que quisiera, no sea que el que lo lea se aburra y deje de leerlo a la mitad.

DOMINGO 13 DE MARZO DE 2016

Para el que no pudo ir voy a hacer una pequeña crónica de lo que paso allí por lo menos desde que yo estuve, que hace bastante que no me animaba, y luego con el tiempo me gusta releerlas
 Y voy a empezar por mi «no presencia»en la meditación, meditar o concentración dependiendo de cada uno, vamos que me imagino , que no estoy en la mente de nadie.
    ¿y que supone eso? Pues yo diría que es como poco, perderse medio curso.
     Siempre se habla de unificar, tanto en movimiento a mano vacía,  como con armas, que es lo que nos ocupaba el domingo, y así se presenta la ocasión de hacerlo con mas compañeros con un mismo objetivo, en silencio y en quietud, por que indudablemente no es lo mismo que solo en casa, hay otras sensaciones, la «masa» , como diría un panadero fermenta mucho mejor toda junta. Y si, eso se traslada luego al entreno con armas……. Que me lo pregunten a mi o a mis nervios que no estaban tranquilos.
 
  Ya siguiendo hay que contar que solo y exceptuando unas katas de laido, todo el trabajo se baso en el trabajo de bokken, en la escuela kashima y dentro de la escuela kashima en un maestro en concreto, y ese maestro hacia  trabajo de aikido y ese trabajo de aikido nos cierra el circulo donde nos movemos, donde estamos, o estoy , cómodo.
 
  Yo creo que en general estamos todos familiarizados con el kihon dachi, ya no parece de extraterrestres, pero yo sigo pecando de no saberme bien los movimientos preestablecidos y entonces esto se complica enormemente, mas todavía cuando  siempre la practico con Roberto García, y claro, el cambio de compañero me deja pasmao. Que difícil es salir de nuestro circulo de confort, del compañero de siempre, y ¿donde se queda potencia y la proyección al bokken?, si mas parecen garrotazos al aire sin sentido,  pero bueno, mirado con perspectiva, creo que se va avanzando, y no poco , que esto es muy difícil, y como en todo lo que trabajamos, nos falta tiempo, ya sea tres horas como en este curso , ya sea el fin de semana entero como en otros, e incluso en clase, se me antoja siempre poco.
 
 y siguiendo con las katas pasamos a ura dachi, la cual cuando las hago de una en una no se me da mal , pero ya todas a la vez hubo un momento que no sabia que estaba haciendo, menos mal que paso el maestro a entonarnos.  Y Pepe claro, que por cierto se me vino a la memoria cuando un sábado entrenando en el Ishimi de Villalba para mi examen de 2º dan me puso en orden todos los Kumilos y Kumitachis, que bueno tener Sempais así, un placer como siempre.
 
 
Ya a ultima hora , la clásica charla de José Gallardo, que nos cuenta muchas cosas, y muchas  se las e oído varias veces, cosas de no faltar casi nunca a los cursos, pero de verdad lo que veo , y mas tras una pequeña charla con el a la salida de un curso,es que sabe un montón de armas y su historia , pero no sabemos sacarle nada de nada, a ver si algún día nos soltamos y preguntamos mas.
 
Y siempre ahí que terminar dando las gracias al maestro Lucio Álvarez, (creo que así hay  que nombrarle, con nombre y apellido)no por hoy sino por todos los buenos momentos de armas y Aikido que nos da.
 
Voy a hacer un inciso sobre el entrenamiento de armas.
 Algunos practicantes de Aikido no son muy partidarios de la armas , no encontrarles el gusto es un problema a la hora de entrenar, no encontrarles el sentido tanto para defensa como para atacar es seguramente otro freno, pero no buscar el gusto, simplemente por el gusto de practicarlo es el mayor impedimento para disfrutar de el plenamente.

un abrazo a todos