Buenos días,
Pufff, ya Beni ha dejado el listón muy alto con su texto…. el mío no creo que llegue a tanto, pero intentaré describir mis impresiones del curso. Allá voy…
Pues sí, después de muchos cursos de verano, invierno, armas, este ha sido el primero sin el Maestro Lucio dirigiéndolo. Circunstancias de la vida ha hecho que sea así, y así debemos asumirlo. De eso se trata, y eso nos ha intentado transmitir el Maestro Lucio muchas veces, que debemos aceptar lo que nos viene y unirnos a ese cambio. La vida está llena de cambios, y éste, uno más, aunque nos duela, aunque echemos de menos las charlas, las broncas, las correcciones, las clases, las indicaciones, todo… debemos asumirla y seguir adelante. Espero que la vuelta sea en breve, querido Maestro. Seguro que es breve, y si no, como bien dices, las circunstancias o el destino ha querido que sea así.
Así pues, nuevo curso con nuevos Maestro, siempre a la altura de la escuela, del legado del Maestro Lucio. Esta vez, la meditación me costó menos trabajo estar concentrado, no se si porque la lesión de rodilla va remitiendo o porque tengo que aprender a vivir con la incomodidad de meditar en una postura incómoda, valga la redundancia, y dedico más tiempo a «ver» mi respiración, a dirigir esa respiración a puntos de mi cuerpo que demandan atención. Aunque como indicó el Maestro Alberto, la meditación tiene que hacerse en una postura incómoda, para que aprendamos a dominar nuestra mente, nuestros pensamientos, que siempre intentan jugarnos malas pasadas pensando en «sus cosas».
Del curso, de las indicaciones de los tres Maestros, Pepe, Alberto y Roberto, pues qué decir; que se mantiene la esencia y el discurso de lo que el Maestro Lucio ha estado exponiendo todos estos años: debemos hacer musubi con nuestro compañero, no debemos forzarle, tiene que haber unión, debemos cuidar a nuestro uke, debemos ser un TODO con él, unir nuestros centros, hacerlo UNO. De eso se trata, de ir, de dar, de unirnos… Intentando limpiar nuestra mente de bloqueos. Ha sido muy instructivo desde mi punto de vista; cada uno explicando a su manera su forma de entender el Aikido, su forma de transmitirnos su idea del Aikido, pero siempre manteniendo el discurso de la escuela.
Ha sido un gusto poder practicar con nuevos compañeros, siento no acordarme de los nombres, pues en eso soy muy malo, bastante tengo ya con acordarme de los nombres de los papás, mamás y amiguitos de mi hijo….. Pero echaba de menos y para mi ha sido una alegría volver a practicar con Angel Cuesta, con mi querido Diego (una preciosidad tu bonsai, Diego….), con Luismi, con David (el municipal), con los compañeros de Majadahonda (siempre dando TODO), con Josemi, Jaime … en fin. Con mucha gente a la que aprecio.
Haciendo las fotos, de la que soy, siempre con mucho gusto, responsable, se ve la alegría con la que la gente practica, el bueno rollo que existe, la camaradería, el buen ambiente…. De eso tienen que estar muy orgullosos tanto los Maestros, como el Maestro Lucio, pues es una obra vuestra el haber generado este ambiente que SIEMPRE se respira.
Vuelvo a decir que se ha echado de menos las charlas e indicaciones del Maestro Lucio. Pero ha dejado una herencia inmejorable en nuestros Sempais y Maestros, y fruto de ello ha sido este maravilloso curso.
Feliz verano a todos, y un fuerte abrazo para el Maestro Lucio.