• Abierto
  • Beni
    Invitado
    15 julio, 2016 a las 13:12 #3542

    « No penséis que he venido a traer paz a la tierra. No he venido a traer paz, sino espada. Sí, he venido a enfrentar al hombre con su padre, a la hija con su madre, a la nuera con su suegra; y enemigos de cada cual son los de su casa. «El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí. El que no toma su cruz y me sigue detrás no es digno de mí. El que encuentre su vida, la perderá; y el que pierda su vida por mí, la encontrará «Quien a vosotros recibe, a mí me recibe, y quien me recibe a mí, recibe a Aquel que me ha enviado.
    «Quien reciba a un profeta por ser profeta, recompensa de profeta recibirá, y quien reciba a un justo por ser justo, recompensa de justo recibirá. «Y todo aquel que dé de beber tan sólo un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños, por ser discípulo, os aseguro que no perderá su recompensa.» Y sucedió que, cuando acabó Jesús de dar instrucciones a sus doce discípulos, partió de allí para enseñar y predicar en sus ciudades.

    Creo que es este el texto que recomienda leamos el maestro Lucio para reflexionar. Me atrevo a publicarlo, aún siendo consciente de que me puedo estar equivocando. Es cierto, en mi opinión, que es un texto, que junto con el articulo del maestro, tiene para «echar un ratito» de reflexión.
    Que os sean leves los calores del verano. Un abrazo a todos.

    Lucio Álvarez
    Invitado
    Entradas: 180
    15 julio, 2016 a las 18:33 #3543

    Efectivamente Beni, ese es el texto que recomiendo. Aunque basta con los versículos 34 al 39 que son los que más atañen al contenido del artículo; al esfuerzo que requiere el sendero y al imprescindible desapego de todo lo material: misogi.
    Muy oportuna tu intervención.

    Un abrazo